sábado, 14 de junio de 2014

SOÑAR ES PODER

La Esperanza se viste de fútbol y de sueños






La bienvenida al Ing. Rodolfo Hernández estuvo a cargo de los pequeños.



Los dueños de la cancha, con el benefactor, Ing. Rodolfo Hernández, al fondo la pantalla gigante a la espera de los 'partidos mundialistas.

La alegría de los chiquitines, acompañaron la jornada.


Por Ruby Stella Morales Sierra

-Yo allá no voy-, dijo el taxista – es peligroso.

-¿Y ya conoce la cancha sintética de fútbol?, le pregunto. –Hoy estrenan la pantalla gigante de televisión con el partido entre Colombia y Grecia…

-No. No sabía, pero eso sí que le ayuda a la gente, dijo el taxista. –Mire, yo soy evangelista y esas cosas cambian a la gente. Se lo digo. Los une.

Descendemos las faldas de la meseta de Bucaramanga, ciudad que quedó atrás, arriba, invisible desde aquí. Y aquí, invisible desde allá. Ahora estamos en el corazón del populoso sector que habitan unos 130.000 habitantes, conocido como Ciudad Norte, un nombre que parece el de una ciudad diferente, deslindado de la pertenencia de Bucaramanga, la capital de Santander.

Ya son casi las once de la mañana y nos separamos de la vía principal que conduce al municipio de Matanza. Llegamos al barrio Esperanza III, donde el centro social es la delineada y lustrosa cancha sintética. Numerosas casas colindan con uno de sus laterales y un lado frontal, separados por una estrecha vía que sirve como parqueadero temporal de vehículos.



Junto a otros carros, una camioneta de la Policía Nacional está estacionada allí y un grupo de 15 uniformados acompaña a la comunidad en este encuentro de emociones y deporte mundialista. “Nosotros pedimos que vinieran para que nos conozcan ahora”, dijo un miembro del comité deportivo.




El Ing. Rodolfo abrazando a la artesana que le obsequió una manilla tricolor que luce en su muñeca. 





Varias tiendas y negocios surgieron recientemente alrededor de la intensa actividad que genera la cancha desde hace un poco más de un año, ahora convertida también en punto de encuentro cultural y comunitario.
Los escalones de gradería rápidamente  empiezan a ocuparse y los vecinos llegan de todas partes, como una colmena tricolor.

En un lateral está la pantalla gigante, encriptada en la colina, como promesa de una velada de fuertes emociones de apoyo al equipo patrio que en breve se estrena frente a los jugadores griegos,  en el debut de Colombia, en el Mundial de Fútbol Brasil 2014.

Las señoras del comité de deportes adornaron los arcos con tiras de banderas y globos con los colores nacionales. En la parte alta de uno de los laterales, se lee en la pancarta: “Los politiqueros nunca cumplen. No más irrespeto.” acompañado del distintivo del Proyecto Lógica, Ética y Estética.



El ingeniero Rodolfo Hernández, cabeza del proyecto y donante de la cancha,  está allí invitado por los vecinos para disfrutar con ellos el trascendental partido de fútbol frente a los griegos, en la pantalla gigante recién instalada, que complementó la dotación de la cancha deportiva.




Con un baile moderno, los niños y niñas arrancan la jornada

"Soñar con un mejor porvenir es poder", ´parte del saludo del Ing. Hernández a la comunidad.

Acompañados del comité de deportes del barrio La Esperanza III.


La emoción del fútbol desde la gramilla de la cancha.


 Un enjambre de niñas y niños  luciendo camisetas amarillas de la selección Colombia, brindan un baile alegre a los asistentes, mientras otros revolotean de un lado a otro, acompañando al ingeniero Hernández. Las madres, siempre ansiosas por cuidar a sus niños pequeños saben que la cancha es el lugar de juegos preferido del sector, y el más seguro.

La cancha de fútbol se convierte en un carnaval de alegría. Los niños, las jovencitas, los jóvenes hacen rodar varios balones y los piques y malabares son el adorno que le da vida al escenario. 

Los saludos, el estrechar de las manos tienen el mensaje de gratitud de las gentes sencillas.  Y también,  en este evento, el ingeniero Hernández, con voz emocionada, agradeció a la comunidad la oportunidad de servir y la alegría de generar felicidad.

Y la ocasión del análisis: “Si no se hubiera despilfarrado el dinero de los contribuyentes, dijo, este sector de la Esperanza III, en esta topografía inclinada, que es bella, tendríamos una realidad diferente. En Europa los ricos viven en las laderas. Y ese es el segundo propósito que vamos a desarrollar en el Norte, empezando por el barrio la Esperanza III,   vamos a convertir el sector en un segmento del Club Campestre de Bucaramanga. Vamos a demostrarle a los ricos que sí tenemos civismo, que sí tenemos ética y que vamos a demostrar que sí podemos vivir en comunidad, todos hermanos…”

Invitó a la reflexión: “Soñar con un mejor porvenir es poder.  Y vamos a desarrollar esos sueños”. Agregó: “Una nueva época llega cuando un pueblo recupera la esperanza, como la está recuperando hoy el barrio La Esperanza III y los barrios vecinos” enfatizó, haciendo réplica al dramaturgo Arthur Miller que pensaba que una época termina cuando los sueños se han agotado.

“Les recuerdo que provengo de una familia pobre, igual que ustedes y soy hijo de una universidad pública, exclamó, vamos a romper la barrera de la mentalidad de ser pobres.”

Y entonces, a partir del momento en que los hinchas del barrio Esperanza III, entonaron de pie, el himno nacional, todos, por arte de magia se convirtieron en asistentes de primera línea del  Estadio Mineirão, en la ciudad de Belo Horizonte, en Brasil y allí, por tres ocasiones maravillosas se abrazaron, bailaron, brincaron y henchidos de emoción y alegría, gritaron los tres goles que llenaron de gloria al equipo ganador de la Selección Colombia, en su primer partido mundialista.

El mundial de fútbol se vive en la Esperanza.



GALERIA DE IMAGENES

La emoción del fútbol, se vivió como si fuera en Belo Horizonte, Brasil




Cupo total de las graderías, alegría y emoción para compartir en familia y comunidad.

Estar cerca a casa, con la familia, vecinos y amigos disfrutando del mundial, no tiene precio.


La gracia del fútbol, belleza y recreación. 

Para todas las edades

El dominio del balón



Fútbol, belleza y alegría-


La celebración de los goles, una emoción nacional.